La casa se encuentra pegada al camino de Santiago, en el kilómetro 22. Sin necesidad de desviarse, es el lugar perfecto para la última parada de descanso. Para quienes quieren iniciarse en la peregrinación puede ser el punto perfecto de comienzo del camino. Sin duda es una experiencia que engancha a caminantes de todo el mundo. La espiritualidad y las emociones del camino hace que muchos quieran repetir.

Siendo esta la vía menos concurrida es perfecta para evadirse, reencontrarse con uno mismo, olvidarse de las preocupaciones, o compartir aventuras y vivencias.

Si aún tienes dudas, la forma de hacer el camino hoy en día es mucho más cómoda. Existen compañías que transportan tu equipaje de alojamiento en alojamiento, para que no tengas que cargarlo, puedas disfrutar del camino, y lo tengas todo a tu llegada a nuestra casa.

Si aún no estás convencido, también trabajamos con agencias que ofrecen un servicio integral, planifican y gestionan toda la ruta según tus preferencias. Desde la reserva de los alojamientos hasta el transporte del equipaje. Sin preocupaciones, para que solo tengas que sentir el camino.